20 OCT 2024
Si eres amante de la buena mesa y quizás también del buen vino, no puedes perderte una excursión por las Langas, la famosa zona de colinas del Piamonte (norte de Italia) cuya capital es la ciudad de Alba y que fue declarada Patrimonio de la Humanidad por la Unesco en 2014. Puedes visitar las Langas a bordo de tu querida autocaravana con base Ducato, ya que en la zona hay áreas de estacionamiento equipadas y también algún camping.
Cualquier época del año es buena para un viaje a las Langas, pero en otoño esta zona adquiere un aspecto particular gracias a los mil colores que toman las hojas de los bosques, pero también por las actividades relacionadas con la vendimia, que nos recuerdan inequívocamente que esta es una tierra de grandes vinos. No olvides cargar las bicicletas en la autocaravana para poder recorrer los caminos que serpentean por las colinas, así como los senderos que atraviesan bosques y viñedos.
En pocos kilómetros, las Langas reúnen algunos de los pueblos más bonitos de Italia, pueblos por los que es un placer pasear, visitar edificios históricos, como torres y castillos, pero donde también es aconsejable hacer una parada en un restaurante típico para saborear los platos locales, obviamente acompañados de un buen vino local. No te olvides de dejar espacio en tu autocaravana para algunas botellas, porque es impensable regresar de las Langas sin llevarse un poco del preciado néctar de las uvas locales, una muestra de sus excelentes vinos, como el Barolo, el Barbaresco, el Barbera, el Nebbiolo y el Dolcetto d'Alba.
Los nombres de los vinos a veces también son los nombres de los pueblos más famosos, empezando por Barolo, donde no faltan bodegas abiertas al público para catas y compras, pero donde también es posible visitar el Museo del Vino WiMu, en el Castillo Falletti, quizás haciendo también una parada en el curioso Museo de los Sacacorchos. Otro pueblo que lleva el nombre de un vino noble es Barbaresco, con su encantador centro histórico y la Enoteca Regional del Barbaresco, ubicada en la antigua iglesia de San Donato. No puedes marcharte sin subir a la Torre Barbaresco, del siglo XI y de más de 30 metros de altura, desde cuya cima es posible disfrutar de unas vistas impresionantes de los alrededores. También puedes realizar una cata “en altura”, en la terraza panorámica ubicada en lo más alto de la torre: disfrutarás de una experiencia verdaderamente única.
A poca distancia de Barbaresco está Neive; también en este caso se trata de un pequeño pueblo cuya visita lleva poco tiempo, pero que realmente vale la pena: es muy bonito pasear por el centro histórico con sus palacios nobiliarios y la Torre del Reloj, pero también es agradable observar el panorama de las Langas desde lo alto de la colina. Neive está incluido en la lista de los “Pueblos más bonitos de Italia”, elaborada por el Comité de Turismo de la Anci (Asociación Nacional de Municipios Italianos).
Otro pequeño pueblo con carácter histórico es La Morra, desde cuyo mirador podrás disfrutar de unas vistas espectaculares de todo el entorno. En poco tiempo llegarás a la Cappella del Barolo, conocida también como Cappella delle Brunate, una capilla decorada con vivos colores por los artistas contemporáneos Sol LeWitt y David Tremlett. No muy lejos se encuentra la Panchina Gigante Rossa, uno de los muchos bancos gigantes presentes en las Langas, algunos de los cuales forman parte del circuito de la fundación Big Bench. Y, además, por toda la zona de las Langas hay diversos castillos, legado de distintas épocas y casi siempre situados en lo alto de las colinas. Entre los más famosos cabe citar los castillos de Serralunga d'Alba, de Grinzane Cavour y de Prunetto.
La última parada de nuestra ruta es Alba, la ciudad más importante de la zona así como centro neurálgico de todas las actividades que giran en torno a la gastronomía y el vino de las Langas. Además del vino, otro producto característico de estas tierras es la trufa blanca, que con su inconfundible aroma se utiliza en algunos de los platos más típicos del Piamonte. Del 12 de octubre al 8 de diciembre se celebra en Alba la 94.ª edición de la Feria de la Trufa Blanca, un escaparate de la alta gastronomía y los mejores productos italianos. Durante la feria, se celebran numerosos eventos, entre ellos el Mercado Mundial de la Trufa en la plaza principal, demostraciones culinarias espectaculares, eventos folclóricos y, por último, pero no menos importante, degustaciones de vinos locales. Alba cuenta con un interesante centro histórico, con la hermosa y colorida plaza del Risorgimento, el Palacio del Ayuntamiento, los pórticos y la catedral de San Lorenzo del siglo XVI en la que se pueden admirar las asombrosas bóvedas azules y doradas que reproducen un cielo estrellado. Pero también es posible visitar el Alba subterránea y descubrir los restos de la época romana y medieval de la mano de un guía experto.
Hace diez años, las Langas fueron declaradas Patrimonio de la Humanidad por la Unesco: vale la pena celebrar este aniversario con una excursión en autocaravana por esta espléndida zona de Italia, donde es posible admirar colinas cubiertas de viñedos y pueblos históricos llenos de encanto, y, sobre todo, disfrutar de su excelente gastronomía y sus buenos vinos.